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Amanece; el sol camina
con sus rayitos de estambre,
frente a la Cruz de la Mina
me voy persignando el hambre.
Soy minero gambusino
que descubro la riqueza,
por ironía del Destino
vivo siempre en la pobreza.
Si descubro alguna mina
la codicia les provoca
y por mi suerte canina
me dan cualesquier bicoca.
Voy de viaje por el tajo
que se matiza de cobre,
no voy de incógnito, viajo
con etiqueta de pobre.
Voy sobre senderos de oro
peldaño sobre peldaño
y aunque riquezas añoro
ser pobre ya no lo extraño.
Solamente el ambicioso
y despiadado patrón,
desconoce la razón
que ampara al menesteroso.
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Camino sin descansar
me lleva al trote el ensueño
de que pudiera encontrar
una fortuna sin dueño.
A veces piedras partiendo
y lamiéndolas por dentro,
hilos de oro pretendiendo
y solo miseria encuentro.
Pobre de raíz y sabia
como árbol en mal terreno,
llevo por dentro la rabia
que dinamita el barreno.
No me acompaña ni un tlaco
al final de la jornada
y voy quedando tan flaco
como el filo de una espada.
Soy viajero que calcinas
mi epidérmico pelambre
tú sabes que tras las minas
me voy persignando el hambre.
El Pilar, Moris, Chih., Mayo de 1958.
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Estos son tres Querubines
de hermosura sin igual
que Dios puso en los jardines
de San José del Pinal.
Primorosa es María Elena
muy amable y atractiva
con su carita morena
y unos ojos que cautiva.
La Güerita Evangelina
llena de gracia y dulzura
nos deleita y nos fascina
con su donaire y finura.
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Adelita la más pequeña
bella flor en miniatura
con su boquita risueña
es dechado de ternura.
Sean de su padre consuelo
y alivio de su vejez
y Dios les conceda un cielo
de dicha y paz a las tres
Arechuyvo, Uruachi, Chih.,
Noviembre de 1959
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